Y SIN EMBARGO TE QUIERO

Aquí la mujer hace la vista gorda ante las infidelidades del marido porque es lo que debe hacer y no solo es que prefiera ahogar la pena llorando sino que prefiere morir antes que poner fin a una relación tan insana donde no hay ni siquiera afecto.
Por supuesto ni se plantea la corresponsabilidad en el cuidado del hijo.

Y SIN EMBARGO TE QUIERO

Letra: Antonio Quintero, Rafael de León y Manuel Quiroga

Me lo dijeron mil veses, / mas yo nunca quise poner atención.
Cuando vinieron los llantos / ya estabas muy dentro de mi corazón.
Te esperaba hasta muy tarde, / ningún reproche te hasía;
lo más que te preguntaba / era que si me querías.
Y bajo tus besos en la madrugá, / sin que tú notaras la cruz de mi angustia
solía cantá:
ESTRIBILLO
Te quiero más que a mis ojos, / te quiero más que a mi vía,
más que al aire que respiro / y más que a la mare mía.
Que se me paren los pulsos / si te dejo de queré,
que las campanas me doblen / si te farto arguna ve.
Eres mi vía y mi muerte, / te lo juro, compañero,
no debía de quererte, / no debía de quererte
y sin embargo te quiero.
II
Vives con unas y otras / y na se te importa de mi soledá;
sabes que tienes un hijo / y ni el apellido le vienes a da.
Llorando junto a la cuna / me dan las claras del día;
¡mi niño no tiene pare... / qué pena de suerte mía!
Anda, rey de España, vamos a dormí... / Y, sin darme cuenta, en ve de la nana
yo le canto así:

ESTRIBILLO

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Y sin embargo te quiero